La editorial Altaya, en su colección "Rallye Míticos", a partir del modelo del Ferrari GTO de Exin, reprodujo el Ferrari 308 GTB con el que Jean Claude Andruet participó y quedó segundo en el Tour de Corse de 1982. El coche original era así
Lógicamente, el Ferrari GTO y el 308 eran coches parecidos pero no iguales. No voy a entrar en las diferencias en la carrocería, sino que me voy a centrar en los detalles para acercar un poco más el modelo al coche original. Ahí van unas fotos del modelo a escala.
A bote pronto, lo que más llama la atención del coche son las llantas, que se parecen a las del coche original como un huevo a una castaña, Por otro lado, los retrovisores no son iguales y para tratarse de un coche de rally no lleva copiloto.
El problema de las llantas tiene fácil solución porque Team Slot tiene en su catálogo una reproducción de las llantas Campagnolo originales del coche que son iguales que las que monta el Lancia Stratos, unas manos de esmalte dorado las dejarán perfectas.
La intención era colocarlas directamente en un par de ejes, pero estas llantas tienen el cuello muy largo. Para las delanteras, corté el cuello 3 milímetros a cada llanta y quedaron bien, pero a las traseras no podía hacerlas lo mismo, porque al tener la garganta más ancha, si las hubiera cortado el cuello el eje casi no entraría en la llanta y quedarían muy poco sujetas. De modo que modifiqué los soportes del chasis para dejarlos más estrechos.
El hecho de estrechar unos soportes del eje trasero se aparta un poco de una "preparación sencilla" pero el trabajo tuvo escasa dificultad. Con un cutter corté los soportes junto con un trozo de la parte inferior del chasis, haciendo una "L". Con la lima y un poco de cuidado profundizamos un poco para dejar los soportes más cercanos entre sí y los pegamos con cuidado de que los ejes queden paralelos entre sí .El resultado del anterior trabajo es este:
Los pilotos traseros del modelo tenían un color muy apagado, para mejorarlos, primero los pinté de esmalte plateado y sobre él pinté con rojo transparente de Tamiya y un rotulador indeleble naranja, que da como resultado unos faros muy reales.
Para acabar, voy a mejorar un poco el interior, algo sencillo, añadirle el copiloto (fundamental en un coche de rally) y decorar un poco el interior para que no quede tan soso. Le he añadido un extintor clonado en resina, unas sencillas barras antivuelco con varilla de evergreen, una palanca de cambios hecha con una alfiler y los cinturones de seguridad con cinta aislante roja cortada en tiras finas.
Y el coche montado queda así:
Con poco trabajo el coche ha dado un cambio radical, y a mejor.
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